jueves, 11 de agosto de 2011

Sectores aseguran que Chile actúa de forma desesperada

Denuncias del Transporte sobre restricciones comerciales

Sectores aseguran que Chile actúa de forma desesperada


Carga boliviana por puertos chilenos es restringida, afectando el libre tránsito comercial establecido en Tratado de 1904.
El sector oficialista manifestó que Chile nuevamente muestra su desesperación al provocar perjuicios en contra del país, luego de las denuncias efectuadas por parte del Transporte Internacional, las cuales advierten que autoridades chilenas “ponen trabas” al sector en perjuicio de las empresas bolivianas en la zona fronteriza de Arica. El dirigente del sector, Gustavo Rivadeneira presentó la denuncia ante el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia.
Según el dirigente de Transporte Internacional de Bolivia, Gustavo Rivadeneira, al término de la reunión con autoridades de Cancillería efectuada ayer, no hubo ningún resultado y sólo recibieron como respuesta la evaluación de la denuncia y posibles acciones posteriores.
“Consideramos que se está analizando la denuncia y estamos sujetos a esperar”, manifestó.
Añadió que no tomarán otro tipo de medidas y que esperaran los resultados de las acciones que tomen las autoridades. “Confiamos en las negociaciones de la Cancillería con sus similares para buscar las soluciones y hacer que el libre tránsito se cumpla”, señaló.
TRATADO DE 1904
Por otro lado, Rivadeneira explicó Chile actúa de manera radical ya que desde este pasado lunes y ayer ya se devolvieron alrededor de 45 camiones y esto demuestra como Chile incumple con el Tratado de 1904, que establece el libre tránsito irrestricto para Bolivia en la zona.
“Es una decisión chilena que tomó aquel gobierno para obstaculizar el libre tránsito después del 23 de marzo. Apoyamos la reivindicación marítima, pero también consideramos que este asunto debe ser considerado y analizado por las autoridades en los niveles que corresponden”, dijo.
DENUNCIA
Rivadeneira, explicó que autoridades chilenas que realizan el control fronterizo en varias regiones y en este caso, en la frontera con Arica, obstaculizan el libre tránsito de camiones bolivianos que exportan diferentes productos hacia Chile.
Dichos obstáculos se advierten en la excesiva petición de documentos y permisos que no estaban estipulados para el transporte de carga que viene de ultramar hacia el territorio nacional.
“Un ejemplo es el permiso ocasional, posteriormente nosotros contamos con una póliza de seguros en daños contra terceros de acuerdo al Conosur. Allá en Chile nos están observando los de fiscalización chilena y hacen que los camiones que no tengan el refrendado por la compañía aseguradora de Chile también sean devueltos hacia nuestro país”, manifestó.
CHILE ACTÚA DE MANERA DESESPERADA
Para el diputado por el Movimiento Al Socialismo (MAS), Galo Bonifaz, esta es una prueba más de la desesperación de Chile en modo de represalia con el pueblo boliviano, manifestando a la vez debilidad.
“Eso demuestra que nosotros tenemos toda la razón las condiciones para continuar con acciones internacionales como propuso el gobierno y lo único que se ve con estas actitudes de soberbia y con esa actitud de restricción de los mecanismos de integración sólo demuestra debilidad, porque nosotros tenemos razón y la comunidad internacional está consciente de ello”, indicó.
ANTECEDENTES
En tal sentido, el Tratado de Paz y Amistad suscrito el 20 de octubre de 1904 entre Bolivia y Chile, que reconoce incondicionalmente a Bolivia el libre tránsito por el territorio y puertos en el Pacífico, es sistemáticamente incumplido por las autoridades chilenas, en perjuicio de empresas bolivianas, en tanto que Bolivia prosigue en las negociaciones de la denominada Agenda de 13 puntos pactada en 2006, sin avances concretos en los temas marítimo, Silala y reparaciones del ferrocarril Arica - La Paz.

jueves, 28 de julio de 2011

Bolivia si puede ser Terceria

Controversia marítima Perú – Chile
Bolivia cuenta con elementos para interceder en La Haya

EL DIARIO Y ANF.- Después de que la representación diplomática boliviana presentará una nota formal ante la Corte Internacional de La Haya sobre los intereses nacionales en la controversia de límites marítimos entre Chile y Perú, legisladores del vecino país solicitaron a su gobierno una respuesta contundente contra Bolivia. Para los analistas, la preocupación boliviana está plenamente vigente y cuenta con elementos de sustento legal.
El investigador Víctor Hugo Chávez, quien participó en octubre pasado como orador de la conferencia “Fundamentos jurídicos para la interposición de la tercería de Bolivia dentro de la demanda respecto a límites marítimos entre Perú y Chile en la Corte Internacional de Justicia de La Haya”, explicó que el país tiene bases legales con intereses sobre cualquier resolución que pueda emitir esta instancia internacional.

Explicó que el 19 de octubre de 2010 tras la modificación del Acuerdo Mscal Andrés de Santa Cruz, firmado por los ex mandatarios Jaime Paz Zamora y Alberto Fujimori (enero 1992) otorgando Perú a Bolivia el uso de la zona económica exclusiva de 200 millas naúticas en el mar de Ilo; que por efecto de un eventual fallo favorable a Chile dentro de este proceso arbitral quedaría Ilo sólo con 40 millas marinas. “Ello perjudicaría también a la Armada Boliviana en cuanto a la instalación del anexo de la Escuela Naval Militar, cuyo terreno fue otorgado en acto del domingo 7 de noviembre de 2010 como efecto de la firma del protocolo de 19 de octubre de 2010, ese es el fundamento de una eventual tercería de Bolivia en ese pleito judicial internacional”.
“En el caso de chile no se tienen mas que promesas, pero ningún derecho como es por el contrario en el caso de Ilo donde si tenemos verdaderos derechos marítimos no soberanos, sobre diversas negociaciones en la zona de Arica (el corredor al norte y acceso con 10 kms de costa) la mas importante fue la de 1975 - 1978 con el abrazo de Charaña, sin embargo Chile fue el que obstaculizo la negociación porque pidió una compensación territorial no solo del terreno cedido sino que Bolivia le compense en territorio el área de 200 millas marinas pero en territorio boliviano”, sostuvo.

LEGISLADORES CHILENOS
El senador Hernán Larraín, miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Alta de Chile, pidió este miércoles al canciller de su país, Alfredo Moreno, presentar ante la Corte de La Haya una “respuesta contundente” al comunicado que Bolivia presentó días atrás y en la que dio a conocer el derecho boliviano de un acceso soberano al Océano Pacífico.
Según medios internacionales, el legislador dijo que el comunicado de Bolivia “no forma parte del proceso” que se ventila en la Corte Internacional de Justicia, pero es necesario que “la Cancillería la conteste porque está llena de imprecisiones o tergiversaciones de hechos que ameritan una respuesta contundente”.
Por su lado, el presidente de esta Comisión parlamentaria, Eugenio Tuma, indicó que el comunicado boliviano es solamente una opinión sobre la disputa entre Chile y Perú, “de tal modo, que el Tribunal no lo ha tomado (en cuenta) como un documento que sea parte del juicio arbitral”.

NOTA REMITIDA
El pasado 1 de julio la Cancillería boliviana informó sobre el envío de una nota diplomática a la Corte Internacional de Justicia en La Haya, en la que da a conocer el derecho boliviano de un acceso soberano al Océano Pacífico.
La nota da cuenta de la posición de Bolivia respecto al diferendo sobre la delimitación marítima entre Perú y Chile que se ventila en esa Corte.
“Luego de un análisis de los antecedentes y fundamentos históricos y jurídicos, la posición de Bolivia en torno a dicho diferendo marítimo, manifiesta como propósito principal, el de hacer conocer a ese alto Tribunal de Justicia Internacional, sus criterios respecto a un tema de vital interés para el pueblo boliviano, cual es su derecho al acceso soberano al Océano Pacífico”, señala el documento.

miércoles, 13 de julio de 2011

Controversia marítima Santiago – Lima

Controversia marítima Santiago – Lima
Reacción soberbia de roterio ante notificación diplomática boliviana



Después de la presentación de la nota diplomática de Bolivia ante la Corte Internacional de La Haya para tomar posición en la controversia de límites marítimos entre Perú y Chile, el gobierno de La Moneda descalificó la iniciativa arguyendo “falta de fundamentos” en una nueva muestra de la soberbia del vecino país para abordar los temas internacionales.



Según el analista político, Edwin Quiroz, el gobierno y los parlamentarios chilenos que descalificaron a la delegación boliviana sólo muestra una reacción común del vecino país y una estrategia que podría luego enfrentar a Bolivia y Perú con réditos para un tercero sobre los espacios marítimos en el océano Pacífico.



“Es la reacción sobre la posibilidad de que La Haya le dé la razón a Perú. A pesar de que Chile considera que Bolivia no debería intervenir en este caso la posición boliviana que fue a pedir que se precautelen los intereses bolivianos perjudican al Perú y no tanto a Chile. Si se perjudican las relaciones bilaterales con Perú, el más beneficiado será como siempre Chile”, dijo.



PRESIDENTE MORALES



En tanto, el presidente Evo Morales pidió en la víspera a la comunidad internacional apoyo para la demanda marítima boliviana para solucionar el centenario conflicto al cual Chile siempre rehuye o descalifica. Recomendó a los estados litigantes evitar que un futuro fallo perjudique las aspiraciones bolivianas de una salida marítima.



“La Cancillería boliviana remitió notas diplomáticas al Perú y Chile haciendo conocer el documento que fue presentado a la Corte de La Haya. Bolivia convoca a los países vecinos y hermanos de Perú y Chile, así como a la comunidad Latinoamericana a coadyuvar decididamente para resolver este centenario problema que tanto afecta a la integración de los pueblos”, declaró el mandatario en Cochabamba.



RESPUESTA DE LA MONEDA



El Ministerio de Relaciones Exteriores respondió a través de un comunicado a la presentación de una nota diplomática que Bolivia entregó en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya para dar a conocer su posición frente a “su derecho al acceso soberano” al mar.



Perú busca ganar 35.000 kilómetros cuadrados de mar actualmente bajo soberanía chilena con el argumento de que los límites nunca han sido fijados, lo que Chile rebate con dos tratados, firmados en la década de los cincuenta, que según Lima son solo pactos pesqueros.



Por último, advirtió que “Chile hace total reserva de sus derechos ante la pretensión de Bolivia de atribuir connotación jurídica a planteamientos políticos e interpretaciones antojadizas”, y reitera que “tales pretensiones son infundadas e inoponibles al Estado chileno”.



PARLAMENTARIOS CHILENOS



En tanto parlamentarios de los distintos sectores dijeron en Valparaíso que la nota boliviana no busca más que generar un efecto comunicacional, que en nada contribuye a las buenas relaciones entre ambos países.



Para el senador de la Democracia Cristiana y miembro de la comisión de relaciones exteriores del Senado, Jorge Pizarro, “ellos buscan generar un hecho que les permita ante la comunidad internacional presentar su demanda como un derecho y eso claramente no es así”.



“Esto no hace más que insistir con la lamentable postura que ha tenido Bolivia en los últimos meses que en la práctica terminó por congelar la agenda de 13 puntos entre ambos países”, sentenció.



Por su parte el presidente de la Comisión de Exteriores de la Cámara de Diputados, el socialista Marcelo Díaz, dijo que este es “un gesto inamistoso y torpe que no tiene ningún destino”.



En la misma línea, el diputado de la oficialista Unión Demócrata Independiente y también integrante de la instancia, Iván Moreira, indicó que Bolivia se equivoca al “pensar que la política exterior de Chile se hace bajo presión”.

martes, 12 de julio de 2011

Bolivia acude a La Haya para informarse sobre controversia

Límites marítimos Perú - Chile
Bolivia acude a La Haya para informarse sobre controversia


Mediante un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores anunció que una delegación diplomática acudió a la Corte Internacional de La Haya para recabar información sobre la demanda de límites marítimos que Perú instauró contra Chile en 2008.



Bolivia de este modo da un paso más dentro de la tercería bajo los principios de derechos expectaticios sobre las costas del océano Pacífico.



La nota explica que tras la controversia bilateral, a principios del año en curso, mediante la Cancillería boliviana se solicitó a la Corte Internacional de Justicia hiciera conocer los alegatos así como los anexos del diferendo sobre delimitación marítima entre las Repúblicas de Perú y Chile, los mismos que fueron remitidos a través de la Secretaría de la Corte en fecha 4 de febrero del año en curso. Como resultado de la valoración de dicha documentación, el Estado Plurinacional de Bolivia, concluyó en la necesidad de hacer conocer a la Corte Internacional de Justicia, las consideraciones e intereses de Bolivia en torno a dicho diferendo.



Tras la presentación de la denuncia internacional por efectos de la controversia bilateral, realizada el 2008 por el gobierno de Alan García, Bolivia se vio en la necesidad de revisar su política interna y decidir si acudiría a una acción de tercería en el tema a razón de los derechos expectaticios que se generan en la costa. El fallo de la Corte de La Haya podría definir nuevos límites marítimos y el país tendría que verificar sus posibilidades de acceder a un espacio que le dé vía libre para la navegación.



DELEGACIÓN



La delegación salió el anterior viernes, sin embargo la noticia fue hecha pública en la víspera: “una delegación encabezada por el director Ejecutivo de la Dirección de Reivindicación Marítima, Rubén Saavedra, y la Cancillería del Estado presentó a conocimiento de la Corte Internacional de Justicia en La Haya, Países Bajos, una nota diplomática, a través de la cual Bolivia hizo conocer la posición de nuestro país, en el marco del diferendo que sostienen las Repúblicas de Perú y Chile ante ese alto Tribunal”.



“Luego de un análisis de los antecedentes y fundamentos históricos y jurídicos, la posición de Bolivia en torno a dicho diferendo marítimo, manifiesta como propósito principal, el de hacer conocer a ese alto Tribunal de Justicia Internacional, sus criterios respecto a un tema de vital interés para el pueblo boliviano, cual es su derecho al acceso soberano al Océano Pacífico”.



“Asimismo, el Ministerio de Relaciones Exteriores informa que en la misma fecha, se curso comunicaciones a las Cancillerías de las Repúblicas de Perú y Chile, haciendo conocer el contenido de la mencionada nota diplomática presentada a la Corte Internacional de Justicia”, concluye la nota.

sábado, 9 de julio de 2011

Asambla Constituyente

El camino para una salida libre y soberana al Pacífico es una Constituyente

Milton L. Lérida Aguirre

Han pasado 132 años y aún no podemos llegar a las costas del Pacífico, unas veces por negligencia, otras veces por politiquería o falta de voluntad, de parte de quienes manejan la Cancillería boliviana. Es hora de que tengamos un camino que nos lleve a una salida libre y soberana hacia el Pacífico. Por eso es de suma importancia que este postulado sea concretado a través de una estrategia y una política interna e internacional que nos permita hacer conocer a todos los bolivianos, así como también a todos los países del mundo, sobre la necesidad que tiene Bolivia de tener una salida libre y soberana hacia el Pacífico.



Para diseñar este camino planteamos: la convocatoria a una Asamblea Constituyente que tenga como único objetivo diseñar una estrategia y una política que nos permita solucionar la mutilación que hemos sufrido y el enclaustramiento en el que vivimos, por imposición de Chile, tomando en cuenta las opiniones, sugerencias y todos los trabajos de investigación realizados hasta el momento.



La Asamblea Constituyente será la expresión del mismo pueblo boliviano, ella representará a todos y cada uno de nosotros y nos mostrará el camino hacia las costas del Pacífico. Además los bolivianos estaremos representados en esta Asamblea porque el enclaustramiento marítimo no es sólo un problema que atinge al Presidente del Estado, o una tarea de diputados y senadores, menos un trabajo sólo de los empleados y tecnócratas del Palacio de Gobierno.



El enclaustramiento de Bolivia en el fondo importa al pueblo boliviano, por eso mismo es de suma importancia que se convoque a una Asamblea Constituyente para que se diseñe una estrategia y una política, a través de los instrumentos de la justicia y el derecho internacional y nuestra demanda, de reclamar una salida libre y soberana hacia el Pacífico, no es exagerada.



Bolivianos, no debemos mostrar pesimismo, porque este es el camino a la degradación y nos llevará a la ruina, por el contrario, un pueblo que conoce su historia se esforzará y actuará por defender su derecho y reclamará la justicia que le corresponde.



Así mismo, un pueblo sin objetivos es prácticamente un pueblo vencido y mientras no enseñemos a nuestros hijos y a los jóvenes que el mar es vital para el desarrollo de Bolivia, esta juventud no tiene futuro.



Bolivia es un pueblo que tiene fuerza, calor y luz, por tanto es una reserva inagotable, infinita, que se constituye en la base para llegar a las costas del Pacífico, más tarde que nunca. Bolivia tiene la urgente necesidad de comunicarse con el mundo, no puede subsistir y no puede desarrollarse sin la comunicación con otros pueblos.



Mientras exista este enclaustramiento, Bolivia siempre demandará al mundo entero justicia por una salida libre y soberana, así mismo habrá un motivo de rebeldía y de conflicto con el país usurpador, porque fuimos expulsados de nuestro Litoral por arbitrio de las armas y la fuerza, que es el derecho de las bestias, como decía el griego Séneca.



No existe en el derecho internacional el que un pueblo esté condenado a vivir con silencio letal, ni los tratados son intangibles, por el contrario, algún día el Tratado de 1904 tendrá que ser revisado y Bolivia habrá completado su soberanía.



Denunciamos ante el mundo que Chile siempre quiso anarquizar a las repúblicas limítrofes, y el enclaustramiento en el que vivimos es un claro ejemplo. Primero, no toma en cuenta los tratados firmados en 1866 y 1874. Segundo, ocupa militarmente nuestro litoral en 1879, que nunca fue suyo y que nunca poseyó, pero lo ocupa a título del vencedor. En fin, Chile es pleitista a todo rumbo, es usurpador a todos los vientos, anarquista en todas las latitudes de América, porque al final, Chile necesita usurpar para vivir.



Mientras Bolivia no tenga un puerto en el Pacífico no habrá paz ni equilibrio continental, porque el enclaustramiento que vive es acaso una de las más graves de Sudamérica. Para Bolivia una salida libre y soberana es cuestión de vida o muerte y no se trata, simplemente, de reparar una derrota, menos buscar una revancha, no se trata de subsanar un error político, territorial o mercantil, se trata de justicia y derecho que Bolivia tiene sobre el mar.



Para recordar a todos los bolivianos, la página más negra de la historia sudamericana es la invasión de Chile a Bolivia en 1879, que al final nos privó de una salida hacia el Pacífico. Este hecho no puede perdurar por más tiempo, por eso invocamos que el actual Gobierno convoque a una Asamblea Constituyente, para que ésta trate específicamente el enclaustramiento marítimo en el que se encuentra Bolivia, es decir para resolver la mutilación territorial que ha ejecutado Chile.



La Asamblea Constituyente tendrá que analizar seriamente el Tratado de 1904, que es el instrumento que nos ha impuesto Chile y por el cual Bolivia pierde su acceso al océano Pacífico, por la fuerza. Por tanto este tratado es nulo de pleno derecho, además es contrario a la justicia y el derecho internacional.



Por otro lado, los derechos naturales que tiene Bolivia sobre el mar son inalienables, es decir no se puede desmembrar o auto mutilar soberanía, menos ha existido consentimiento voluntario para firmar el Tratado de 1904. Por el contrario, Bolivia ha sido presionada a punta de fusil para que firme el Tratado, quede sin salida hacia el mar y ceda sus puertos al usurpador.



Por todos estos antecedentes, una vez más proponemos al gobierno del Sr. Evo Morales que convoque a una Asamblea Constituyente, que es de prioridad para exponer ideas y mostrar el camino para una salida libre y soberana hacia el Pacífico, para enfrentar, de una vez por todas, la mutilación, el enclaustramiento al que nos ha sometido Chile desde 1904.



Así mismo, pedimos a todos los países, a todos los hombres y mujeres del mundo, su apoyo a esta demanda, exigimos justicia en el ámbito del derecho internacional para que se restituya la soberanía boliviana sobre las costas del Pacífico.



Bolivia no debe vivir enclaustrada, el mar es vital para ella.





lunes, 4 de abril de 2011

Tres vías de una demanda

Hay dos tribunales en La Haya y otra opción es terciar en litigio Perú-Chile


Bolivia tiene tres vías para encarar la demanda marítima

dato Una analista explica el proceso en cuatro etapas que mínimo durará tres años hasta el fallo final; en cualquier etapa se puede dar una conciliación y el juicio termina.



En La Haya hay dos jurisdicciones: la Corte Internacional de Justicia y la Corte Permanente de Arbitraje. Bolivia puede recurrir a una de esas dos instancias para presentar la demanda; la tercera alternativa es que el Estado vaya a una tercería en el proceso que sostienen Perú y Chile.



La abogada internacionalista explicó que en el caso que Bolivia respalde su demanda en el protocolo de 1907, estaría optando por el tribunal de arbitraje, donde el proceso tiene cuatro etapas y el tema se resolvería, en el mejor de los casos, en tres años.



Esto, sin contar con el tiempo que dure la preparación de la proposición acusatoria a cargo de la Dirección de Reivindicación Marítima, que hará llegar el documento final ante La Haya.



Longaric explicó que ahí inicia un proceso complejo. El protocolo de 1907 señala que cualquier diferencia que se desprenda de la interpretación o ejecución del Tratado de 1904, firmado entre Bolivia y Chile, podrá dirimirse por vía arbitral ante el tribunal de arbitraje de La Haya.



“Ese protocolo obligaría a Chile a aceptar la jurisdicción de la corte de arbitraje. El pacto de Bogotá también refiere el procedimiento de arbitraje y dice que las partes tendrán la facultad de ir al arbitraje si se ponen de acuerdo para resolver diferencias que surjan de tratados que las partes hubiesen suscrito”, señaló.



Una vez definida la jurisdicción se comunica a Chile para que ambas partes designen a sus dos árbitros, pero en ese proceso el país demandado puede presentar argumentos técnicos para rechazar el arbitraje.



Al definirse la competencia, el ente arbitral deberá conformar un tribunal, dos elegidos por Chiles y dos por Bolivia; entre los cuatro eligen un quinto que será imparcial, el árbitro dirimidor.



En la tercera etapa se presenta la demanda oficialmente y se pone en conocimiento de Chile; el proceso sigue y las partes presentan pruebas y alegatos, si las partes no ponen obstáculos, el proceso dura unos tres años, caso contrario se prolonga más.



Por último, el tribunal arbitral dictará el laudo (sentencia o fallo) arbitral.



Si esa instancia se declara incompetente de conocer el caso antes de todo este proceso, Bolivia puede recurrir a la Corte Internacional de Justicia, cuya jurisdicción se abre a través del pacto de Bogotá, que fue ratificado por nuestro país recientemente por la Asamblea Legislativa Plurinacional.



“Entonces se debe analizar si es más conveniente ir al arbitraje o al órgano judicial; ninguna es instancia de apelación de la otra. En ambos casos, las sentencias tienen calidad de cosa juzgada y tienen fuerza ejecutiva. En esos tribunales ya no hay otra opción”, señala la analista.



Por último, Bolivia puede recurrir, aunque no de forma simultánea a las otras, a una tercería, es decir ser parte del proceso que tienen Perú contra Chile.



Se trata de un tema de delimitación marítima entre esos países sobre la soberanía de una zona marítima de aproximadamente 37.900 kilómetros en el océano Pacífico.



La tesis peruana indica que el límite marítimo estaría aún sin determinar, pero la chilena sostiene que no hay temas limítrofes pendientes con el Perú, ya que existen tratados internacionales vigentes sobre la materia. La controversia se remonta a 1980.



“Esa posibilidad es viable para que La Haya tomen en cuenta los derechos que Bolivia tendría sobre la zona que está en litigio. La Corte Internacional de Justicia recibirá la solicitud, ya que Bolivia ratificó el pacto de Bogotá, antes no era posible. La aceptación de la tercería se resolverá cuando La Haya dicte el fallo final entre Perú y Chile, así es la admisión de la solicitud”.





Algunos detalles del proceso judicial

Dato Todos los países miembros de las Naciones Unidas tienen acceso a la Corte de La Haya.



Inicio Se hace una notificación de acuerdo especial de carácter bilateral entre los estados que desean resolver una controversia; si esto no ocurre, el país demandante presenta una solicitud unilateral con el Estado demandado.



Proceso En 2001, Perú comienza a elaborar el proceso y en 2005, su Congreso aprueba una ley para delinear la demanda judicial por el conflicto limítrofe. En 2008 presenta la demanda contra Chile, que hasta la fecha sigue en proceso.



Tiempo A Bolivia podría tomarle un tiempo similar para realizar el proceso ante los tribunales internacionales.



viernes, 1 de abril de 2011

Caso Silala debe ser abordado por Dirección de Reivindicación

Consenso en Asamblea Legislativa



Aguas del manantial Silala que nacen en Potosí y son desviadas hacia Chile desde hace 103 años.

 
Asambleístas oficialistas y de oposición coincidieron en que el tema de las aguas del Silala debe ser tratado por la Dirección de Reivindicación Marítima a conformarse. El diputado por el Movimiento Al Socialismo (MAS) Eliseo Sesgo, afirmó que otra prioridad de los especialistas que estudiarán la nueva política de gobierno es el uso de las aguas del manantial boliviano por Chile. Por su parte, la diputada por Convergencia Nacional, Maida Paz, dijo que este tema debería utilizarse estratégicamente en el marco de la Constitución.



“La conformación de una Dirección de Reivindicación Marítima también debería tomar en cuenta el tema de las aguas del Silala porque hasta el momento no se tiene ningún resultado al respecto, no puede ser que por un lado Chile se niegue a discutir la soberanía y que por el otro nos esté quitando las aguas del manantial sin ningún permiso”, afirmó el diputado Sesgo.



Aseveró que tras no lograrse resultados concretos con Chile en la Agenda de 13 puntos que incluye el tema marítimo y las aguas del manantial Silala, Bolivia optó por recurrir a tribunales internacionales. El legislador dijo que durante la gestión de la presidenta chilena Michelle Bachelet existieron algunos avances, pero que no fueron suficientes para el pueblo boliviano porque el ascenso de Sebastián Piñera al poder habría afectado el modo de ver las negociaciones.



CARTA MAGNA



Por su parte, la diputada de oposición, Maida Paz, aseveró que la Dirección de Reivindicación Marítima debería tomar en cuenta el tratamiento de las aguas del Silala a la par de la lucha por una salida soberana al Pacífico. Sin embargo, dijo que lo primero que debería hacer el poder Ejecutivo era tomar en cuenta la disposición novena de la Constitución, la que indica que el Gobierno en un lapso de cuatro años después de su posesión demandará o renegociará tratados internacionales que sean contrarios a la Carta Magna.



“Se debería revisar la disposición transitoria novena de la Constitución donde dice claramente que el Ejecutivo tiene cuatro años para adecuar tratados que no estén enmarcados. Por ello, antes de ir a un tribunal deberíamos negociar el tratado de 1904 con Chile y una vez se conforme la Dirección de Reivindicación, ésta debe tomar en cuenta el tema de las aguas del Silala porque son de importancia para los chilenos que las utilizan en la vida domestica y industrial, lo que debe ser una estrategia boliviana”, aseveró Paz.



SILALA A TRIBUNALES



En anteriores días, legisladores de la oposición y el oficialismo coincidieron en señalar que el tema de la deuda centenaria por el uso de las aguas del manantial Silala también debería ventilarse en estrados judiciales internacionales, así como la demanda marítima. Además, manifestaron que la nueva política de reivindicación debería manejarse con mucha responsabilidad por la delicadeza del tema.



El diputado de CN, Mauricio Muñoz, aseveró que como ciudadano boliviano respaldaba cualquier iniciativa gubernamental que sea planteada en bien de la recuperación de una salida al mar, “pero siempre y cuando ésta sea honesta y sincera”. Expresó que todos los temas pendientes con Chile, incluido el tema Silala, deberían llevarse a tribunales internacionales, pero que el Jefe de Estado tenía como tarea principal la unificación de todos los sectores sociales del país, actitud que demostraría la honestidad de la nueva política de Estado asumida el 23 de marzo.




jueves, 31 de marzo de 2011

Recelo. El Presidente siente que el vecino quiere perder tiempo

Evo dice que Chile tendió una trampa en diálogo por el mar


EL PRESIDENTE DICE QUE CHILE LE TENDIÓ UNA TRAMPA

La Razón Tras asegurar que Chile “sólo quiere hacer perder el tiempo” en el diálogo sobre el mar, el presidente Evo Morales admitió que cayó “en la trampa” tendida por el país vecino e hizo notar que la reunión de diciembre con su colega Sebastián Piñera marcó el inicio del giro en la política del mar.


Encuentro. El Presidente ofreció una conferencia de prensa, tras reunirse con alcaldes de Potosí para recibir proyectos de riego.En una conferencia de prensa en Potosí, el Mandatario recordó que el proceso de diálogo iniciado el 2006 no dio resultados y que, en consecuencia, la decisión de llevar a instancias internacionales el tema del mar es un paso en el objetivo de recuperar soberanía en las costas del Pacífico.



“En los cinco años de diálogo me he dado cuenta que Chile sólo quiere hacer perder el tiempo”, aseguró y reveló que exigió, sin resultados, a su colega chileno Sebastián Piñera, en la reunión de diciembre en Brasil, propuestas sobre la demanda nacional.



“En las últimas reuniones que tuve en Brasil, junto con el canciller David Choquehuanca y el ministro de Defensa (Rubén Saavedra), presionamos (a Chile y sostuvimos que) queremos saber una propuesta formal escrita, que será una base de negociación. Y el Presidente de Chile me dice: esta reunión es informal. Cuando exigimos ¿dónde está la propuesta?, ¿por dónde va ser la soberanía?, no hay, entonces, ¿qué nos toca?, también apelar a los tribunales internacionales”, explicó.



En el encuentro bilateral al que hizo referencia el Mandatario se acordó formar una comisión de alto nivel, integrada por los cancilleres, para acelerar el tratamiento de la agenda de 13 puntos, donde está la reivindicación nacional. La reunión se realizó en febrero, en La Paz, y se acordó acelerar el diálogo y agendar un próximo encuentro presidencial.



“Tal vez en este corto tiempo como Presidente he caído en la trampa de Chile, (soy) sincero, muy responsable, porque cuando exigimos ¿dónde está la propuesta?, ¿por dónde va a ser la soberanía?, no hay”, insistió el Mandatario, quien expresó sus dudas sobre los resultados del diálogo. “Esperar otros 132 años mediante el diálogo, ¿qué se va a conseguir?”, se preguntó.



El 23 de marzo, Día del Mar, el Gobierno anunció la decisión de llevar el tema del mar a instancias internacionales e inició una estrategia para consolidar la unidad en torno a esta iniciativa. En Chile, el propio Piñera salió a responder que no existen temas limítrofes pendientes y que no condice el diálogo con la demanda.



El canciller chileno Alfredo Moreno advirtió el martes que la decisión de Morales llevará a un mal resultado a Bolivia. Su colega boliviano, David Choquehuanca, solicitó ayer a Moreno utilizar los conductos regulares para emitir comentarios sobre el tema.



Morales, en la conferencia en Potosí, aseguró que la decisión tomada no representa ningún retroceso en la temática marítima. “Es un paso más para seguir avanzando, felizmente tenemos apoyo de la comunidad internacional”, sostuvo.



Prevén convocar al Canciller





Seriedad

El vicepresidente Álvaro García considera convocar al canciller David Choquehuanca a la Asamblea para que explique la estrategia marítima. Coincidió con el Canciller en llamar a gobernantes, políticos y ciudadanía a manejar con “mucha seriedad” la temática marítima.

lunes, 28 de marzo de 2011

Una estrategia para la demanda marítima se trabaja desde 1999


Recurso. Evo Morales recibió un proyecto el primer día de su gestión presidencia

 El constitucionalista e investigador en temas marítimos, Víctor Hugo Chávez, trabaja hace más de una década en el diseño de una estrategia para llevar a Chile a La Haya y recuperar el mar para Bolivia. El documento fue entregado a Evo Morales para su análisis en enero del 2006.



Fue el mismo Chávez quien contó esta semana a La Razón que hizo llegar el proyecto de demanda marítima al Mandatario boliviano el primer día de su gobierno. “El lunes 23 de enero del 2006, a las 8.30, le hemos remitido vía ventanilla de la Presidencia el proyecto de demanda, que de acuerdo al seguimiento que hicimos a la hoja de ruta, fue derivada al Ministerio de Relaciones Exteriores”, recordó el legista.



Explicó que trabajó en esta propuesta desde el año 1999 y que el coautor es su hermano, Wilfredo Chávez, actual viceministro de Coordinación Gubernamental del gobierno de Evo Morales. De acuerdo con el especialista, el documento originalmente fue elaborado en 1999, bajo el rótulo de “Estrategia de Bolivia para la salida digna y soberana al océano Pacífico”.



“Ha cambiado si se compara la primera propuesta con el proyecto que tenemos ahora. Es una propuesta tecnificada y con los argumentos necesarios”, aseguró Chávez, quien concluye que el equipo jurídico que se encargaría de elaborar el proyecto de demanda que buscaría presentar el Gobierno, está destinado a basarse en los elementos que él propuso hace años, toda vez que se trata de una estrategia basada en el tratado firmado por Bolivia y Chile en 1904 y que fue concluido “un buen día de septiembre de 1999”.



Argumento. En la biblioteca de la Cancillería, Chávez se encontró con el acta del protocolo de modificación del Tratado de 1904. “Es como un contrato que se firma y luego se tiene una adenda, que data del 16 de abril de 1907 y que fija que la corte de arbitraje de La Haya es el organismo competente para la resolución de cualquier demanda boliviana”, dijo.



Entonces dice que no cabe duda de que ése es el organismo internacional al que se debe recurrir. Luego explicó que la estrategia de la demanda consiste en reclamar un territorio boliviano que no está contemplado en el Tratado de 1904, además de otros no cedidos aChile.



“Se debe tener en cuenta que Bolivia no le cedió de manera expresa a Chile el territorio comprendido entre el paralelo 23° y 24°, donde están las poblaciones de Antofagasta y Mejillones. Nos pagaron 30 mil libras esterlinas, sí, pero fue por el territorio comprendido entre el paralelo 23° a la línea demarcatoria”, indicó. Respecto al paralelo 24°, como no establece nada según Chávez, no se pagó ni un centavo.



Dijo que tampoco está dentro del tratado el mar territorial, “donde Bolivia tiene seis islas e islotes, que no están comprendidos, de acuerdo con la letra fría del tratado”.



Además arguye que el Acta Protocolizada del 15 de noviembre de 1904 no modifica el Tratado de 1904 y en ese entendido Bolivia no cede dichos dominios. “En ninguna parte del Acta Protocolizada se ha pactado la modificación del Tratado de 1904 cediendo por Bolivia a través de su enviado plenipotenciario el territorio y mar comprendido entre los paralelos 24º a 23º que no son citados ni mencionados de manera expresa por el Tratado de 1904 y su precedente que es el Pacto de Tregua de 1884”, indicó.



Reclamo. En ese sentido, “legalmente” el territorio y mar entre los paralelos 24º a 23º son bolivianos, de acuerdo con Chávez, y la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya tendría que emitir criterio en estricto derecho sobre el particular.

Entre los alegatos, afirma el proproyectista, también se haría referencia al “Estado bélico” ocurrido entre 1879 a 1884 en la llamada “Guerra del Pacífico”, pues “en realidad fue una invasión y usurpación de territorio boliviano conforme se sostiene en la presente demanda”.



Definir la estrategia o proyecto de demanda podría llevar hasta un año a los juristas y equipo que disponga el Gobierno, pero tras presentarla, “se tendría novedades en dos a tres años”, dice Chávez.



La haya es el tribunal definido



Tratado

El 20 de octubre de 1904, a través de los ministros plenipotenciarios Alberto Gutiérrez (Bolivia) y Emilio Bello Codesido (Chile) se suscribió el Tratado de Paz y Amistad entre ambos Estados que puso fin al régimen establecido por el Pacto de Tregua del año 1884.



Protocolo

El protocolo de sustitución de árbitro se firmó el 16 de abril de 1907, en Santiago de Chile. En el documento, el artículo 12 dispone que se debe acudir a La Haya en caso de diferendo.



‘Pasó por manos de cinco presidentes’



De acuerdo con el constitucionalista Víctor Hugo Chávez, el proyecto que elaboró para recurrir ante el Tribunal de La Haya en reclamo de una salida soberana al Pacífico, pasó por manos de cinco predecesores de Evo Morales.



“Este proyecto de demanda marítima fue de conocimiento del gobierno de Hugo Banzer Suárez; luego de Jorge Quiroga, cuando se cambió de estrategia a la demanda y se nos dijo que ese gobierno tenía otra línea política en el tema marítimo”, dijo.



Después, se lo habría propuesto a Gonzalo Sánchez de Lozada, pero no hubo respuesta. “Pese a que reiteramos el planteamiento, no nos respondieron”, recordó Chávez.



Pero insistió en la gestión de Carlos Mesa, en el centenario del Tratado de 1904, cuando su ministro de Relaciones Exteriores era Ignacio Siles; sin embargo, “pese a que remitimos el documento ya como un proyecto de demanda que debía ser presentado ante La Haya, el presidente Mesa, optó por otra política”. Por otra parte, reveló que en la gestión de Eduardo Rodríguez Veltzé, quien no tenía más que convocar a elecciones, la propuesta “se durmió”.



viernes, 25 de marzo de 2011

La instancia es la Corte Internacional de La Haya

Según investigador Víctor Hugo Chávez


Corte Permanente de La Haya es la instancia de apelación internacional


La demanda marítima boliviana podría seguir el camino del arbitraje legal a partir de la Corte de La Haya.



Después del anuncio del primer mandatario boliviano, Evo Morales, sobre apelar a organismos internacionales, el investigador Víctor Hugo Chávez afirmó que la instancia reconocida para iniciar este proceso judicial es la Corte Internacional de La Haya. Por su parte, el ex canciller Armando Loayza dijo que la acción legal podría durar al menos seis años en ser elaborada y presentada ante tribunales internacionales para resolver la demanda histórica con Chile.



El investigador aseguró que “se debe sentar a Chile ante el banquillo de la Corte de La Haya” y presentar todos los respaldos y documentos históricos para sustentar la demanda boliviana.



Según explicó a EL DIARIO, el primer paso para emprender esta demanda de arbitraje es reconocer que la instancia jurídica de resolución de conflictos es la Corte Internacional de La Haya, que además fue reconocida por el propio Estado chileno cuando suscribió el Protocolo Sobre Sustitución de Arbitro el 16 de abril de 1904.



El documento señala: “(...) designar a la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya para que entienda, si el caso se presentara, en las referidas cuestiones, acogiéndose al efecto a lo dispuesto en el Artículo 26, Capítulo II del Título IV de la Convención para el Arreglo Pacífico de los Conflictos Internacionales, suscrito en 29 de Julio de 1899, por las Potencias concurrentes a la Primera Conferencia de la Paz, celebrada en la expresada Capital del Reino de Holanda”.



“Por tanto, existe el reconocimiento del Estado chileno a someter las controversias ante la Corte de La Haya y ese deberá ser el inicio para que las autoridades bolivianas emprendan una demanda internacional, no sin antes agotar todos los recursos legales y vías diplomáticas”, dijo.



DIFÍCIL Y EXTENSO TRÁMITE



Por su parte, el ex canciller Armando Loayza, dijo que el cambio de estrategia diplomática puede durar varios años en consolidarse, porque el Estado no cuenta con abogados internacionales en las cortes y ya existen experiencias que no dieron resultado como la interposición ante la Liga de Naciones en la década de 1920.



“El discurso del Presidente no fue una sorpresa, ya algunos asesores como Walker San Miguel venían anunciando esta tesis jurisdiccional. Si es así será un camino muy largo de cinco o seis años”.



Loayza calificó como una contradicción la postura de Morales Ayma que primero criticó a la Organización de Naciones Unidas (ONU) por emitir la resolución de intervención en el conflicto de Libia y luego apela a los tribunales internacionales, en especial la Corte de La Haya, organismo jurídico de última apelación dependiente de la ONU.



El Primer Mandatario dijo durante los actos cívicos del 23 de Marzo, que Bolivia continuará trabajando mediante el diálogo bilateral con Chile, pero que ahora existen los tribunales internacionales a los que el país recurrirá como parte de la estrategia de reivindicación marítima.



“La comunidad internacional debe entender ahora que ha llegado el momento, para que esta inmensa herida que tenemos los bolivianos por nuestro enclaustramiento marítimo sea cerrada en base a un proceso de connotaciones históricas que con un fallo justo y certero devuelva la cualidad marítima a Bolivia. Por todo ello, la lucha de la reivindicación marítima que ha marcado la historia, ahora debe incluir otro elemento fundamental: el de acudir a los tribunales y organismos internacionales demandando el derecho de una salida libre y soberana al pacífico”, dijo Morales.

Añadir leyenda

jueves, 24 de marzo de 2011

BOLIVIA APELA A UN TRIBUNAL INTERNACIONAL


MAR: BOLIVIA APELA A UN TRIBUNAL INTERNACIONAL

Mecanismo. Decidió formar una Dirección que se encargará exclusivamente del tema

La Razón El presidente Evo Morales advirtió ayer, durante el acto del Día del Mar, con apelar a los tribunales internacionales para definir por esa vía el diferendo marítimo con Chile por el enclaustramiento que sufre el país desde hace 132 años.





ACTO. El presidente Evo Morales durante su discurso por el Día del Mar.La estrategia está acompañada por la conformación, mediante decreto, de una Dirección General de Reivindicación Marítima, “que será la instancia dentro de la cual jurídicamente se preparen las acciones por la causa marítima boliviana, y a la cual todos los bolivianos, gobernantes y gobernados, ayudaremos a que cumpla eficazmente su trabajo”, explicó Morales.



Paralelamente, pidió a la Asamblea Legislativa Plurinacional apruebe “a la brevedad posible” todos los tratados y convenios internacionales que posibiliten esta acción, medida que hasta este martes había descartado como una opción inmediata, según consta en una entrevista que publicó el diario chileno El Mercurio.



Fecha. El Mandatario hizo el anuncio de que acudirá a tribunales internacionales "demandando en derecho y en justicia una salida libre y soberana al océano Pacífico” durante su discurso en conmemoración del Día del Mar, alocución que en Santiago era esperada con mucha expectativa, según revelaron políticos chilenos del oficialismo y la oposición que fueron entrevistados por La Razón el último lunes.



Antes de informar sobre la acción judicial que decidió encarar su gobierno, Morales hizo un repaso de documentos históricos que respaldan el hecho de que Bolivia nació con acceso al mar y de los esfuerzos nacionales e internacionales para buscar una salida al enclaustramiento.



“No obstante, a pesar de 132 años de diálogo y esfuerzos, Bolivia no tiene una salida soberana al Pacífico. Frente a esta realidad es necesario dar un paso histórico por la esperanza y el bienestar de los bolivianos”, señaló.



Inmediatamente comenzó a explicar el paso que decidió dar, cinco años después de que su gobierno iniciara con Chile un diálogo bilateral sobre una agenda de 13 puntos que incorpora el tema marítimo y que hasta la fecha no se tradujo en una propuesta concreta por parte de Chile.



Recordó que el derecho internacional dio grandes pasos en las últimas décadas y que, en consecuencia, ahora existen tribunales internacionales donde “los estados pueden demandar lo que en derecho les corresponde”.



Dijo entonces que la lucha por la reivindicación marítima “debe incluir otro elemento fundamental: el acudir a tribunales y organismos internacionales, demandando en derecho y en justicia una salida libre y soberana al océano Pacífico".



“La comunidad internacional debe entender ahora que ha llegado el momento para que esta inmensa herida que tenemos los bolivianos por nuestro enclaustramiento marítimo sea cerrada en base a un proceso de connotaciones históricas que con un fallo justo y certero, le devuelva la cualidad marítima a nuestro país”, agregó.



Anticipando los argumentos que Bolivia podría esgrimir ante los tribunales internacionales, dijo que el Tratado de 1904, que selló la paz entre ambos países tras la Guerra del Pacífico, es “injusto” y que “se forjó bajo la presión chilena y la fuerza”.



Al concluir su discurso, el Mandatario convocó a todos los bolivianos a sumarse a esta estrategia. “Éste es un momento de la historia en el que debemos despojarnos de cualquier interés personal, sectario y partidario, y anteponer los intereses de la patria. Les convoco a sumar nuestros esfuerzos en este desafío”, sostuvo.



El año 2006 el gobierno de Morales comenzó a trabajar con Chile en una agenda de 13 puntos que incluye la demanda marítima, sobre la que, sin embargo, no se conocieron avances concretos. Hace tres semanas, pidió a su homólogo chileno, Sebastián Piñera, plantear una propuesta antes de este 23 de marzo. No tuvo éxito.



Morales elegirá a directivos



La Dirección General de Reivindicación Marítima será conformada en las próximas horas mediante un decreto supremo y la elección de sus miembros dependerá del presidente Evo Morales, anunció este miércoles el ministro de Autonomías, Carlos Romero. La nueva dirección dependería de la Cancillería, cuyo responsable, David Choquehuanca, evitó hablar ayer.



El diálogo continuará



No obstante el ajuste en la estrategia marítima del Gobierno, el diálogo bilateral con Chile sobre la base de una agenda de 13 puntos continuará, según señaló el mandatario Evo Morales en su discurso por el Día del Mar. “Bolivia es un país digno, que mira de frente con fe y esperanza su futuro, sin abandonar jamás el diálogo franco y sincero con Chile”, sostuvo.



El ministro de Autonomías, Carlos Romero, y el presidente de la Cámara de Senadores, René Martínez (MAS), confirmaron esta posición. Dijeron que a la par de las nuevas acciones que anunció el Ejecutivo, el diálogo con Chile continuará en los niveles acordados por ambos gobiernos hace cinco años.



“Como dijo el presidente Evo Morales, el diálogo con Chile continuará de la manera más franca y amigable. Acudir al derecho internacional es una herramienta más en este proceso. Creo que no se verá deteriorada la relación con Chile después de haber trabajado sinceramente los últimos cinco años”, aseveró el ministro Romero.



En la misma línea, en una entrevista concedida a La Razón un día antes del discurso presidencial, el canciller David Choquehuanca anunció que “estamos en un proceso de diálogo y negociación que aún no ha terminado”, y no descartó que en este proceso, entre las fórmulas de solución que se discutan a futuro para atender la demanda marítima boliviana, esté una que gire en torno a un acuerdo gradual e inicial sin soberanía.



No se descarta acudir a la Corte de La Haya

El presidente de la Cámara de Senadores, René Martínez (MAS), no descartó que el Gobierno acuda al Tribunal de La Haya para recuperar una salida soberana al Pacífico. “Habrá que acudir a todas las instancias internacionales, incluyendo a La Haya para resolver la demanda marítima, que no será resignada por parte de Bolivia”, señaló.



Debe continuar el trabajo en el ámbito bilateral

El ministro de Autonomías, Carlos Romero, afirmó que el diálogo con Chile continuará. “El Presidente (Evo Morales) dijo que seguiremos trabajando en el ámbito bilateral para retornar al océano Pacífico, pero utilizar los mecanismos contemporáneos que utiliza cualquier Estado es una condición pacifista”, afirmó el ministro.



El Gobierno altiplánico equivocó el camino

El ex canciller y actual presidente de la Democracia Cristiana, Ignacio Walker, afirmó que el país altiplánico ha equivocado el camino. En el caso de Chile, la política exterior es una política de Estado, y no de gobierno, y todos, gobierno y oposición, de derechas a izquierdas, compartimos una sola doctrina: el respeto por los Tratados.



Cuba apoya salida soberana al Pacífico

El embajador de Cuba, Rafael Dausá, afirmó que su país apoya una salida soberana al mar. "Tenemos una posición muy clara y diría que histórica, nosotros apoyamos el derecho de Bolivia a una salida soberana al mar y consideramos que la mejor vía para eso es la vía negociada, ya sea bilateral o a través de los organismos internacionales"



No deberían haber presiones inadecuadas

"La única forma de satisfacer la sentida demanda del pueblo boliviano de un acceso soberano al mar es a través de un acuerdo amplio, sin presiones inadecuadas que entorpezcan la adecuada relación entre ambos países, sacando el tema de la mediterraneidad boliviana de la agenda política doméstica”. Eugenio Tuma, senador del PPD



No se puede golpear y por otro lado pedir confianza

“Chile no va a entregar soberanía, por lo tanto, para construir una fórmula distinta que concilie varios intereses se requiere mucha confianza, diálogo político y generosidad. Y no se puede hacer de manera unilateral, por un lado, pidiendo una cosa y, por otro lado, golpeando de una manera que no corresponde". Jorge Pizarro, senador de la DC.





viernes, 18 de marzo de 2011

Bolvia tiene islas en el pacifico

Según investigador Víctor Hugo Chávez


Bolivia tendría derechos sobre seis islotes en océano Pacífico

El investigador Víctor Hugo Chávez sostiene que Bolivia tendría derechos sobre seis islotes en el océano Pacífico que no fueron incluidos en el Tratado de 1904.


Pese a la historia de invasión y usurpación de territorios bolivianos por parte de naciones vecinas y la mediterraneidad con la que vive el país, Bolivia tendría derechos sobre seis islotes en el Océano Pacífico ubicados entre los paralelos 23 y 24, y que no fueron parte del Tratado de 1904 ni de otros acuerdos con Chile, según concluyó el investigador y académico Víctor Hugo Chávez a EL DIARIO.



El investigador, quien lleva varios años desarrollando estudios históricos, técnicos y legales en torno a la demanda boliviana de regreso hacia el océano Pacífico, sostuvo que además de la salida con soberanía que es inherente al país, también se debe pensar en recuperar seis islotes que no fueron cedidos o comprendidos dentro de los acuerdos posteriores a la invasión de 1879 por parte de Chile.



“Hemos identificado seis islas e islotes que se encuentran perfectamente válidos. En Bolivia tenemos un mapa del siglo pasado donde se consignan dos islas, pero utilizando la metodología de la actualidad y la tecnología hemos verificado que no corresponden a los paralelos 25 y 26, pero sí aquellas que están en los paralelos 23 y 24 que son la Santa María, Guanosa, de Lagartos, entre los principales y sobre las cuales no debiera existir mayor duda porque no se encuentran consignadas en ningún documento y aún si se considerara la Conferencia que dio nuestro enviado plenipotenciario el 15 de noviembre de 1904 del mismo modo no se las menciona en esos documento y es más, se las excluye, es decir que estas islas son bolivianas”, explicó el investigador.



ARBITRAJE INTERNACIONAL



Según Chávez, la Corte Permanente de Arbitraje es la instancia a la que el Estado boliviano debe recurrir para interponer este delicado tema y poder reclamar las seis islas que no fueron, en ningún caso, cedidas a Chile u otro país. Recordó que anteriores gestiones diplomáticas fracasaron por falta de información y desconocer los procedimientos, sin embargo, ahora existen estudios y la apertura de las naciones para devolver a Bolivia sus derechos, tanto marítimos como de desarrollo regional.



“La vía de reclamar estos islotes también pasa por el arbitraje, la vía de reclamar es el arbitraje ante la Corte Permanente de Arbitraje sin hacer mayores interpretaciones, porque a algunos les gusta interpretar la norma y decir que vayamos a otras instancias, pero los documentos pactados que tenemos con Chile sostienen que la Corte es la instancia a la que debemos recurrir, otra determinación implicaría un nuevo revés a la diplomacia boliviana cuando en 1921 Avelino Aramayo y Franz Tamayo llevaron la demanda marítima ante la Sociedad de Naciones que no aceptaron la misma porque no fue presentada de forma correcta”, agregó.



PARALELOS 23 Y 24



El Acta Protocolizada del 15 de noviembre de 1904 fue desarrollado mediante una conferencia, empero, de ningún modo son acciones legales porque se trata de declaraciones emitidas por el entonces enviado extraordinario y ministro plenipotenciario de Bolivia en Chile, don Alberto Gutiérrez frente a la propuesta del ministro de relaciones exteriores del vecino país.



“El enviado boliviano no tenía inconveniente en efectuar las declaraciones que se le han solicitado, pero ellas son eso: declaraciones, no implican en lo mínimo la modificación del tratado de 1904, es más, en ninguna parte del acta protocolizada se ha pactado la modificación del tratado de 1904 cediendo por Bolivia a través de su enviado plenipotenciario el territorio y mar comprendido entre los paralelos 24º a 23º que no son citados ni mencionados de manera expresa por el tratado de 1904 y su precedente que es el pacto de tregua de 1884; por consiguiente se concluye que el territorio y mar que se ubican entre los paralelos 24º a 23º son bolivianos y la Corte Permanente de Arbitraje de la Haya deberá emitir criterio en estricto derecho sobre este particular”, citó Chávez.




lunes, 28 de febrero de 2011

Indigna propuesta de trueque de agua dulce por mar

Indigna propuesta de trueque de agua dulce por mar

Rodolfo Becerra de la Roca

El pasado domingo en una nota anterior hemos protestado contra opiniones de trueque de gas por mar, formuladas por dos diputados. Pero he aquí que inmediatamente después, un amigo, analista de historia, nos hace llegar una propuesta inaudita de “Agua dulce por agua salada”, que está navegando en Internet, esta vez con la firma de un Senador de la República, más indigna que las criticadas.



Desde luego que todos tenemos libertad de emitir nuestras opiniones, pero éstas cuando salen del marco de la sensatez y el decoro, cuando del modo más descarado lanzan desvaríos que hieren la razón y la cordura, alteran el sereno discernimiento.



Los 13 puntos de la peregrina tesis de agua dulce por agua salada, las impugnamos:



1.- Si Chile sigue al pie de la letra una política de Estado, de no ceder ni un milímetro de su territorio, Bolivia debe formular igual política de Estado para demandar sus derechos que no han sido consolidados por tratados, porque no hay guerra internacional que otorgue derechos.



2.- Sepa el senador que el enclaustramiento de Bolivia no es solamente resultado del Tratado de 1904, sino de varias apropiaciones indebidas, amén de que este tratado es susceptible de nulidad y/o de revisión por lo menos. Sería ilustrativo que se lea nuestros alegatos dominicales anteriores en EL DIARIO.



3.- ¡Si Chile debe toda su prosperidad y solidez económica a los recursos arrebatados de nuestro Departamento Litoral, no hay razón que justifique que Bolivia siga sacrificando otros recursos adicionales a favor del depredador de ayer!



4.- Aquí se refiere a que Chile suma intereses vitales para su subsistencia futura en: 1° Consolidar los corredores bioceánicos a través de territorio boliviano que le posibiliten llegar con sus productos al Brasil, Paraguay y Uruguay y a ultramar a través del Río de la Plata y Atlántico. 2° Necesita agua dulce a futuro y tiene puestos sus ojos por decisión geopolítica en la cuenca central y lacustre entre nuestras dos cordilleras.



O sea, según el senador, Bolivia debe seguir siendo el tonto útil que debe contribuir a la expansión económica chilena y resolver sus carencias de agua dulce. Nosotros nos oponemos a ambas pretensiones: NO al corredor bioceánico para Chile y nuestras aguas del altiplano y cordilleras deben servir para el desarrollo del país, para convertir nuestro altiplano en un vergel productivo.



5.- Bolivia no debe otorgar a Chile ninguna facilidad para acceder al agua dulce de la cuenca central y lacustre del altiplano boliviano.



6.- En diferentes momentos históricos Chile siempre ha manejado fórmulas distraccionistas que han sido otras tantas burlas a la solución a nuestro enclaustramiento.



7.- Hemos repetido varias veces que Bolivia no tiene “aspiraciones” para “recuperar una salida a nuestro mar”, tiene DERECHOS para recuperar soberanía marítima y, para ello, hemos lanzado la doctrina de oponer la coraza de la verdad, la justicia y el derecho contra la fuerza.



8.- Las bases de la reiniciación de las negociaciones iniciadas en Charaña son inaceptables, fueron una burla en su forma y en el fondo de la propuesta. El callejón al norte de Arica es impracticable y no lo hace factible ni un supuesto acuerdo del Perú.



9.- La solución del diferendo peruano - chileno por el límite del mar territorial, en el Tribunal Internacional de Justicia de La Haya, no sólo interesa a estos dos países. Será muy importante para Bolivia si es favorable al Perú, como que en justicia corresponde que sea así, porque su demanda es justa y en este sentido, servirá de antecedente para confiar en la justicia internacional.



10.- Las ponencias de generales chilenos, por más influencia que éstos tengan, no serán convenientes para Bolivia, porque éstos actúan en el marco de su geopolítica que siempre será contraria a nosotros.



11.- La urgencia de Chile de agua dulce para satisfacer sus necesidades básicas, no justifica trocarla con un “acceso soberano al océano Pacífico para dar solución a nuestro enclaustramiento”, porque nuestro DERECHO es cristalino y no está sujeto a ninguna condición, menos a compensación de alguna clase. Por lo tanto “agua dulce por agua salada” es una fórmula traidora.



12.- En este punto, el que formula tan entreguista tesis que dice ser “franco con su pueblo”, cree que “es la primera vez en nuestra historia común que los intereses de nuestros pueblos no se cruzan”. Qué ingenuidad. Nosotros que estudiamos la historia de esta relación, no confiamos en la sinceridad chilena, menos en esa ilusoria confianza mutua. La Agenda de los 13 puntos es una trampa de la astucia de Chile para su beneficio; pues, estudiando concienzudamente esta Agenda, ningún punto es favorable a Bolivia, como se ha demostrado en otras notas.



13.- Finaliza el documento recomendando “aceptar la posibilidad de buscar dar solución a nuestro enclaustramiento marítimo a través de la tesis de Charaña, por considerarla apropiada, ya que al contener la posibilidad del trueque territorial nos pone en una situación de honor, dignidad y no afectaría a la soberanía de ninguno de los dos estados, mas al contrario nos enaltecería, porque estaríamos comprando nuestro acceso soberano al océano Pacífico.”



Esta conclusión de la propuesta lastima la honra del pueblo de Bolivia; porque la tesis de Charaña únicamente favorece a Chile, que de un modo inoperante para Bolivia resolverá su problema pendiente, con el añadido inaceptable de trueque territorial (y de agua dulce) que afecta precisamente nuestro honor y dignidad y compromete la soberanía del Estado envileciéndonos, porque no podemos comprar nuestro acceso al océano Pacífico, teniendo derechos reivindicatorios inobjetables.



lunes, 21 de febrero de 2011

¿somos estúpidos?

Gas por mar, ¿somos estúpidos?



Ya en esa hermosa proclama de la Junta Tuitiva de 1809 se protestaba contra ese “silencio bastante parecido a la estupidez” de los altoperuanos sobre la pasividad con que se sometieron a la opresión colonial. Y esta conducta se ha observado a lo largo de más de un siglo en las relaciones con Chile, país al que por un sino infortunado y siniestro incomprensible, los gobiernos, las cancillerías y la pseudo burguesía de Bolivia se han supeditado invariablemente. 

Anteriormente el Gobierno boliviano resolvió rebajar el derecho marítimo a cambiar el mar con el energético, ¡como si tal cosa! Recientemente vuelven con el tema, esta vez salido del magín de dos diputados, pues uno de ellos ha manifestado que no se debe descartar debatir la opción de “gas por mar para cumplir la demanda centenaria entre Bolivia y Chile”, otro habló sobre “la posibilidad de incluir el tema de hidrocarburos como estrategia ante las autoridades chilenas” (EL DIARIO de 8/2/11) 

¿Por qué surgen estas conductas tan insensatas que no concuerdan con la dignidad de un pueblo, menos con la verdad histórica y jurídica del derecho que nos asiste? ¿Es que Bolivia está pidiendo una limosna marítima? ¿Hasta cuándo nuestros gobernantes no van a entender que Bolivia tiene derechos irrenunciables y que los derechos no se sujetan a trueque ni a otro género de compensaciones? 

Desde tiempo atrás estamos ilustrando objetivamente en las páginas de EL DIARIO, generalmente en domingo, sobre la realidad de los problemas surgidos de la invasión de 1879 y del subsiguiente Tratado de 1904; porque los bolivianos habíamos descuidado irresponsablemente, tanto tiempo, el estudio, la investigación y el conocimiento a fondo de la naturaleza jurídica, los alcances, realidades, emergencias y trascendencia de estos hechos tan infaustos para Bolivia. 

Después de haber evidenciado -a través de nuestro estudio- que por el atraco de 1879, de la mal llamada “Guerra del Pacífico”, quedaron en poder de Chile territorios bolivianos por varias causas: a) Una unilateral resolución del Tratado de 1874 seguida de una ilegítima reivindicación de todo un paralelo geográfico. b) Apropiación de territorios no cedidos por ningún título, en el arco del río Loa y a lo largo de la frontera actual, todos sujetos a perfecto derecho de reivindicación de Bolivia. c) Por aquel malhadado Tratado de 20 de octubre de 1904 del que penden causas de nulidad y revisión inobjetables, que tienen aparejados otros bienes patrimoniales, amén del mar e islas no transferidas. 

Entonces, no hay razón para que Bolivia espere la devolución de lo que fue suyo como una dádiva o como concesión graciosa de parte de Chile. 

Debe demandar la reivindicación de mar y territorio sin condicionamientos ni compensaciones de ningún genero, porque el derecho de reivindicación de Bolivia es cristalino, lo que le permite plantear una demanda precisa y contundente que, desde luego, no es el callejón al norte de Arica, que es la solución inaceptable, la menos conveniente ante la magnitud de lo que puede pedir la víctima de tanto despojo. 

Bolivia debe pedir territorio y puerto soberanos al margen de toda otra consideración, como una cuestión especial y específica y no, como al presente, dentro de un paquete de 13 puntos. Porque su especialidad y trascendencia no puede estar mezclada con otras cuestiones de menor importancia. Gravísimo error estratégico y de concepto, otro ardid con el que fue enredada nuestra Cancillería. 

Otra equivocación está en la falta de altivez en el tratamiento del problema. Parece que nuestros gobiernos le tuvieran miedo al poderoso invasor de otrora, que puede estar armado hasta los dientes, como lo está, pero la verdad es superior a la fuerza, porque tenemos un reclamo patrimonial legítimo, tenemos una demanda de reparación de un derecho ultrajado. No obstante, el vecino cree que el Gobierno de Bolivia no puede sugerir, no puede pedir algo que altere la soberbia chilena, como el reciente pedido de nuestro Presidente de que haga conocer su planteamiento hasta el 23 de marzo, cuando Bolivia, dadas las circunstancias de los despojos, está en posición de exigir. 

No pedimos a Chile que nos cedan ni un centímetro de su territorio, el pueblo boliviano clama la devolución justa de lo mal habido. No pedimos ni una gota de mar ajeno, sino la recuperación de lo que nunca transferimos en ningún pacto ni contrato. 

Vergüenza debe provocar a quienes, por ignorancia de la verdad histórica y jurídica, quieran trocar mar por recursos naturales. Vergüenza debe dar a quienes pretenden obtener mar con mayores enajenaciones territoriales satisfaciendo la creciente codicia del usurpador de siempre. 

Bolivianos, nuestro derecho a la recuperación de territorio marítimo está libre de toda compensación, de todo canje, de toda gracia, porque nuestro legítimo derecho nace de la verdad, de la justicia y del derecho.

lunes, 14 de febrero de 2011

EL DERECHO DE BOLIVIA AL MAR

El derecho de Bolivia al mar


Los chilenos están desesperados por no perder las aguas del Silala ni el gas boliviano. Si los bolivianos acuerdan exportar sus productos por el puerto de Ilo, los puertos de Iquique y Arica perderán millones de dólares ya que los chilenos viven de los exportadores bolivianos. Por eso tratan nuevamente, con falsas promesas, cuentos y fábulas, de ofrecer corredores y enclaves sin soberanía marítima. Otra vez Chile quiere estafar al pueblo boliviano.
Ojalá algún día se cumpla el sueño del Mariscal Santa Cruz, y por fin se unan como hermanos Perú y Bolivia, lo que las oligarquías del Siglo XIX no permitieron.
A Bolivia se le ha cercenado el territorio que era la válvula de su vida, pues hemos quedado completamente aislados del mar y con un carácter de tributarios de las naciones limítrofes. Así como el principio de la vida de familia tiene por condición el suelo y el territorio, análogamente para la industria el elemento que la anima es el mar. Todas las grandes naciones, las que hacen un esfuerzo para industrializarse, tienden al mar. Es categórico que en la era del comercio mundial ningún país puede conseguir autodeterminación sin intercambio con aquél, y ello solamente se logra en forma efectiva con puertos propios y soberanos en el mar.
Chile se hace la ilusión de que ha enterrado el derecho marítimo boliviano y de que sobre el mismo ha colocado la misma lápida que ha puesto sobre nuestros puertos y el río Lauca, cacareando a los cuatro vientos que “es un asunto zanjado para siempre y que nada debe, ni está obligado a nada, mucho menos a devolver un


PUERTO SOBERANO.

La invasión, depredación y actual dominio de nuestro Litoral por la fuerza militar y la violencia y coacción con la que nos obligó a firmar el injusto tratado de 1904, son inadmisibles e ilegítimos. La cancillería chilena dice que son “derechos de victoria”... ¿Llaman derechos al cohecho anglo-chileno? ¿Llaman victoria al asalto premeditado y agresión a un país indefenso?

Agresión de Abraham Köenig

El embajador de Chile en La Paz, el 13 de agosto de 1900, nos agredió con su célebre brulote sin parangón en los anales diplomáticos de América, manifestando: “El antiguo Litoral boliviano es y será para siempre de Chile, quien lo ha ocupado y se ha apoderado del mismo con el mismo título con que Alemania se anexó las provincias francesas de Alsacia y Lorena, con el mismo título con que los EEUU han tomado Puerto Rico. Nuestros “derechos” nacen de la fuerza bruta agresora y victoriosa, la ley suprema de las naciones. El litoral es rico y vale muchos millones; eso ya lo sabíamos; lo guardamos porque vale; que si no valiera no habría interés en su conservación. Chile no debe nada, ni está obligado a nada, mucho menos a devolver un puerto”.
Cada vez que llega un nuevo Cónsul chileno a presentar cartas credenciales a La Paz, la prensa boliviana le pregunta: ¿Qué piensa del pedido boliviano de un puerto?; y la respuesta agresiva no se hace esperar: “Bolivia puede tener todas las “aspiraciones” que quiera, pero no tiene ningún derecho al mar”.
Bolivia clama pronta reparación por el enclaustramiento al que ha sido sometida. Recuperar el mar será reencontrar el destino marítimo de nuestro Estado y salvarlo de caer en el engaño de un “corredor” inservible sin puerto propio ni soberano.

Justicia para Bolivia antes de integración

No se puede hablar de una unión de naciones sudamericanas (Unasur) si no se exige justicia para Bolivia y se deja de ignorar la iniquidad de haber enclaustrado a un pueblo hermano y entronizado en América, por la política corrupta a la que sólo apelan los pueblos sin justicia y que invocan a su favor las armas, la invasión y la usurpación. Con el Tratado de 1904 Chile ha usurpado territorios, a sabiendas, por el derecho internacional, de que ningún Estado puede imponer a otro la renuncia a perpetuidad de su territorio e independencia.


EL PACTO AMERICANO

celebrado en Washington en abril de 1890 ha establecido que: “la teoría de la conquista será repudiada por el Derecho Internacional Americano y no se reconoce y se considera nula toda cesión de territorio hecha bajo amenaza de guerra o en presencia de fuerza armada. La Nación que hubiere hecho tales cesiones, tendrá derecho a exigir su devolución”. Chile está impidiendo, por medio de arbitraria ocupación militar del Departamento del Litoral de Bolivia, el cumplimiento de este pacto.
La independencia de América Latina sólo podrá materializarse sobre la base de la integración continental en el campo económico, de modo que todos los Estados alcancen un nivel más o menos equilibrado, tal como está ocurriendo en la Comunidad Económica Europea. Para ello es imprescindible solucionar previamente la cuestión del puerto propio y soberano para Bolivia. Chile, culpable de nuestra clausura geográfica, tiene la llave del grillete de nuestra prisión que detiene nuestro progreso.
El Estado boliviano tiene que hacer valer su derecho marítimo en el campo diplomático. Sudamérica quiere el imperio de la paz y el desarrollo integrado, y por ello el problema pendiente con Chile se convierte automáticamente en multilateral.
La comunidad de naciones y los organismos internacionales especializados deben exigir a Chile la solución del enclaustramiento de Bolivia, sin dádivas geográficas como la faja ilusoria al norte de Arica, que es un espejismo. El corredor sin puerto soberano al norte de Arica es un presente ridículo comparado con la magnitud del territorio usurpado por Chile a Bolivia.
Lo que ha hecho Chile con Bolivia no tiene antecedentes en la historia mundial. Ningún Estado ha condenado a la asfixia perpetua a otro, como en el presente caso, cercenándole sus únicos vitales pulmones habilitados con gran sacrificio por los bolivianos durante sus primeros 50 años de vida republicana: Antofagasta, Mejillones, Cobija y Tocopilla. Chile tiene la obligación moral, política y ética de restituir a Bolivia su acceso propio y soberano al mar, terminando con el funesto tutelaje que ha imperado hasta hoy.
En el tratado de 1904 que se le impuso a Bolivia se dice que Chile accede al dominio del Departamento del Litoral Boliviano, pero no es legítimo que esa letra sea en la práctica una condena al enclaustramiento perpetuo de un Estado que, como el boliviano, merece por derecho propio contar con sus vitales puertos SOBERANOS, con los que sustenta su DERECHO.
A cambio, Bolivia podría vender gas a Chile, como lo hemos decidido en el referéndum vinculante de 18 de julio de 2004, de utilizar el gas como recurso estratégico para el logro de una salida útil y soberana al océano Pacífico.

jueves, 10 de febrero de 2011

El presidente Piñera y la salida de Bolivia al mar

Sociedad Boliviana de Estudios Históricos

El presidente Piñera y la salida de Bolivia al mar

Abraham Köenig, mentor del ultimátum de guerra que le fue entregado al canciller de Bolivia, Eliodoro Villazón, emplazó al Gobierno liberal de J.M. Pando a entregarle el mar boliviano mediante un tratado a suscribirse o enfrentar, en caso de resistencia, la reanudación de la guerra. En respuesta a este ucase el canciller Villazón, por toda aceptación, le pedía a Köenig, inconcebiblemente, reservarle en el tratado a firmarse un puerto de salida al mar como única condición de la aceptación boliviana del ultimátum. Explicándole al Gobierno boliviano la imposibilidad de atender a Bolivia en su petición de reservarle un puerto en el norte de Chile, Köenig le hizo conocer al canciller Villazón su excusa con esta disculpa: “Al norte de Arica no hay puerto, ni siquiera una caleta mediana; desde Arica hasta Sama la costa es brava y casi inabordable”. “Al norte de Arica la vista se pierde siguiendo las sinuosidades de una costa inhospitalaria”. “....en conclusión, se impone la fuerza, Chile no acepta la cesión”.

El presidente Piñera conocía dicho antecedente, tal vez lo olvidó muy a propósito para reincidir en la misma postura de Köenig, al declarar recientemente que su opinión es negociar con Bolivia sobre la base de una salida al mar por el norte de Chile, sobre la frontera del Perú. Maliciosamente o no, al adelantar una propuesta de solución al pedido boliviano de obtener una salida al mar ha incurrido nuevamente en burla contra los justos derechos que tenemos para recuperar soberanía marítima. Ofrecerle a Bolivia una “faja territorial” de 10 kilómetros de ancho, en una región inhóspita, “falto de seguridad y abrigo”, no constituye un principio serio de entendimiento sino de consumación de una humillación a la dignidad boliviana. Una estrecha franja de territorio situada entre las extensas costas de Chile y Perú, no toca ni por asomo al desenclaustramiento de Bolivia, que es la esencia del arreglo pedido.

Al contrario, la negación a dicha petición empeoraría la situación precaria de Bolivia, ilimitadamente, hasta llegar a un punto histórico de inanición nacional porque Chile está trabajando para llegar a ese momento. El error de Bolivia es sentirse desamparada por la comunidad de naciones y la ley internacional y soñar con llegar a un acuerdo a nivel político con Chile, de Estado a Estado, sabiendo que este país agresor lo está sumiendo con su dominio implacable bajo el despotismo de un régimen colonial, cuando el problema del “tratado” es una cuestión esencialmente jurídica y no de dominación. Chile ha invadido el territorio nacional con su ejército y se ha apoderado del mar por la fuerza.

El “Tratado chileno de dominio” es la imagen exacta de los fines perseguidos por la invasión y la guerra, la imposición de su dominio político y la implantación de feroces castigos como el enclaustramiento que reduce su status a una situación de paria internacional. Pero Chile no ha de festejar para siempre su victoria actual sobre Bolivia. A la luz de la historia real, el país vecino no ha adquirido ningún derecho definitivo de propiedad del mar con el “tratado”. Conoce la comunidad internacional de naciones que Bolivia nunca le ha transferido a Chile sus legítimos derechos al mar y nunca ha renunciado a su soberanía marítima.

El agresor, empecinado, no quiere entender que con el “Tratado de dominio” no puede en derecho obtener de Bolivia ninguna cesión territorial o transferencia de derechos de propiedad del mar boliviano. Para resolver esta situación anómala creada por Chile, se pretende sustituir el “derecho” por el “dominio” de las armas; existe el derecho civil internacional y la Corte Internacional de Justicia de La Haya. Hasta ahora, Bolivia no ha recurrido a la justicia internacional, pero debe hacerlo y obligar a Chile a respetar el orden internacional vigente entre los Estados democráticos y un procedimiento civil que norme, legalmente, las relaciones entre los Estados, conforme a derecho, para no fiarse de los “acercamientos” rapaces y de las mentidas “confianzas mutuas” aparentes. A más de un siglo de las patrañas ya conocidas, como son los falsos “diálogos”, se sigue sonsacando los derechos de Bolivia debilitados por el Tratado de Guerra.

Después de haberse firmado el “Tratado de Paz y Amistad”, Bolivia no ha dejado de ser víctima de más despojos y agresiones, instigados por las triquiñuelas del “tratado” opresor chileno. Hoy continúan las asechanzas geopolíticas sobre las materias primas bolivianas inventariadas por Chile en la Agenda sin exclusiones del año 2006, como gas, agua, petróleo, minerales, etc., como se ve en la Agenda de la penetración expansionista chilena sobre las riquezas naturales de la nación.

La “salida” de Bolivia de su actual prisión, al mar, por una inhóspita “faja” de territorio a trabajarse en el norte chileno, nunca dejaría de ser otra cosa que una ventana de salida a un mar ajeno y a una costa “inhospitalaria”, convirtiendo a Bolivia en tierra interior de Chile. ¿Qué haría Bolivia con una costa de 10 Km. de ancho en una región “bravía, feroz, indómita, salvaje”? Bolivia acabaría sus últimos días de aislamiento en un lugar de confinamiento de la región costera desértica de Chile, país que, por amarga ironía, ha sido dotado por Bolivia de varias carreteras dirigidas hacia los puertos que nos ha usurpado, de dos ferrocarriles al servicio de sus intereses y de un paraíso del masivo negocio negro moviéndose en gigantescas caravanas hacia los puertos secos del contrabando.

Bolivia, en el siglo anterior, está en la historia, ha sido derrotada por una invasión largamente preparada para rendirla y ha sido sometida a un régimen de dominio colonial por la traición liberal que aceptó el “tratado” chileno. Sin embargo, de tan infaustas catástrofes sufridas, Bolivia se mantiene hoy en pie, altiva, a pesar de tener amputado el Departamento del Litoral y usurpado el mar invadido, sus ríos despojados, privada de soberanía marítima, enclaustrada por el dominio absoluto y perpetuo del “tratado” chileno, esquilmada por el libre tránsito impuesto a perpetuidad y sometida su economía a un régimen tributario. Esta “salida” de Bolivia de su cautiverio actual al mar universal, sería permitida por Chile sólo para exportar minerales.

Esta receta prescrita por el presidente Piñera a la nación, retrotraería a Bolivia al antiguo status de colonia española y a la minería de enclave de Potosí para trasplantarla en nuestros días al país en aplicación del dominio chileno. Este es el destino de Bolivia por el que trabajará el actual Gobierno del presidente Piñera, cuando para asombro de todos los pueblos, en forma abierta se niega soberanía a la “salida” de Bolivia al mar, en ejercicio de un dominio que no puede ser más que colonial, implantado sobre Bolivia con el “tratado” de 1904, rotulado por Ismael Montes y Germán Riesco, presidentes de Bolivia y Chile, con el membrete humorístico de un “Tratado de Paz y Amistad” inexistente.