jueves, 24 de abril de 2008

Rotolandia y Ecuador repotenciarán arsenal aéreo con Super Tucanos
Rotos compran 12 naves, mientras Ecuador inicia negociaciones

Gonzalo Aguilar
Sendos comunicados oficiales ratifican que el poderío aéreo de las fuerzas armadas de Chile y Ecuador será reforzado con la compra de cazabombarderos ligeros para contrainsurgencia EMB 314 Super Tucano. En el caso de los vecinos sureños, la adquisición se realiza para el entrenamiento de sus pilotos, según dice la versión oficial.

Según el comunicado de la Fuerza Aérea de Chile, el avión Super Tucano, fabricado por la empresa brasileña Embraer, será el nuevo entrenador táctico para los pilotos de combate. En total se comprarán 12 unidades de ese modelo, y en breve se iniciará el proceso de negociación para determinar los plazos de entrega de los aviones, su apoyo logístico y otros detalles.
Según se da cuenta, la formación de pilotos de combate de la aviación militar chilena se iniciaba con el entrenamiento básico en los aviones Pillán T-35, fabricados por la Empresa Nacional de Aeronáutica (Enaer), de Chile. La etapa de entrenamiento avanzado se realizaba con los CASA A-36 "Halcón", de licencia española.
En tanto que la Fuerza Aérea del Ecuador se apresta a iniciar negociaciones para adquirir hasta 24 aviones Super Tucano. En palabras del general Rodrigo Bohórquez, ya se ha contactado a la empresa brasileña Embraer para la adquisición de las naves, no obstante no precisó fechas.
Este anuncio ratifica lo dicho por el presidente ecuatoriano Rafael Correa, quien hace pocos días anunció la modernización de las Fuerzas Armadas y que, específicamente en el caso de la aviación, anticipó la compra de los Super Tucano para fortalecer la flota aérea de aviones de ataque, cuya baza principal la componen los cazas Kfir, de fabricación israelí.
Correa destacó que la institución militar ha perdido capacidad operativa "por la desidia, la descomposición política y la satanización de todo gasto, incluso en defensa". Se pronunció por acelerar la modernización de los medios y armamento bélico, con miras a evitar nuevas invasiones a suelo ecuatoriano, como pasó el 1 de marzo último con la incursión de militares colombianos.
"Acelerar lo más rápidamente posible la capacidad operativa, el equipamiento, la modernización de todas las capas de las Fuerzas Armadas, entre ellas la Fuerza Terrestre, con mejores equipos de comunicación, mejores armas", apuntó el mandatario, quien también anticipó que se comprarán nuevos radares para colocarlos en la frontera con Colombia.
No solo para entrenar
Pudiendo alcanzar una velocidad máxima de 593 km/h, y una autonomía de vuelo de 4,820 kilómetros sin repostar, el EMB 314 Super Tucano no solamente puede ser útil para labores de entrenamiento de pilotos. De hecho, los fabricantes le añadieron características ideales para la guerra en la selva tropical y para la "contrainsurgencia", el ataque a blancos ligeros en tierra.
Y es que pese a que su motor con turbopropulsión que no lo hace apto para enfrentar a aviones de alta tecnología (cazas o interceptores), pero le proporciona la velocidad ideal para atacar aeródromos e instalaciones en tierra, así como infantería y, si cuenta con la misilería correcta, vehículos blindados.
Justamente, en Brasil es utilizado el avión para misiones de patrulla y observación en la vasta selva amazónica, y sus características lo hacen ideal para la guerra en la jungla, que se aleja del sistema de combate tradicional por las condiciones del terreno.
Colombia y República Dominicana adquirieron algunos Super Tucano, y Embraer tiene la idea de vender el modelo para países del sudeste asiático, que justamente cuentan con una superficie boscosa. Su desarrollo se originó a partir del modelo previo, el EMB 312 Tucano (30 de estas naves en la Fuerza Aérea del Perú), y su vuelo inaugural data del año 2000.
Desde fábrica, la nave cuenta con dos ametralladoras de 12.7 mm (FN Herstal) en las alas, un cañón de 20 mm bajo el fuselaje, así como lanzaderas para alojar hasta cuatro cohetes de 70 mm. Se le pueden adosar bombas convencionales o inteligentes para objetivos en tierra, y además puede alojar los misiles aire-aire AIM-9 Sidewinder o Python 3/4.
Orígenes
El diseño del EMB 314 tuvo su origen en la política del gobierno brasileño de iniciar, a inicios de la década pasada, la vigilancia extrema de las fronteras e interceptar vuelos ilegales costeados por el narcotráfico. Brasil, en una gran proporción, limita a través de la Amazonía con varios países sudamericanos, siendo mayor el aislamiento en las zonas colindantes con Colombia, Bolivia y Perú.
Fue así que nació el SIVAM (System for the Vigilance of the Amazon), y los requerimientos militares para tal tarea configuraban la adquisición de un avión bombardero, ligero de tamaño pero capaz de cargar con munición ligera y pesada. Para cuando el Super Tucano tuvo su vuelo inaugural (2000) el SIVAM contaba además con los modernos aviones de reconocimiento R-99, que Embraer pudo vender además a Grecia y México luego de comprobarse su eficacia.
La creación de la aeronave estuvo enmarcada dentro del "Proyecto ALX", que en principio buscaba cubrir la necesidad de sustituir al avión de entrenamiento Embraer EMB 326GB Xavante (licenciatura original, el Aermacchi MB-326). La Fuerza Aérea Brasileña puso algunas condiciones adicionales como para poner a prueba la ingeniería de Embraer.
Así, el proyecto necesariamente debía ser capaz de resistir las altas temperaturas, la humedad ambiental, las lluvias constantes, propias de terrenos como la Amazonía. Aparte de cubrir todo eso, Embraer colocó a la aeronave el motor turbopropulsor, que le permitiría mayor cobertura y autonomía de vuelo.
Otras características atribuidas al prototipo, debido a su diseño ligero, le permitían operar sin mayor complicación tanto de día como de noche, en cualquier condición metereológica, además de darle la capacidad de aterrizar en precarios o pequeños campos de aviación.
El primer vuelo de este monoplaza tuvo lugar el 2 de junio de 1999, y unos meses después se presentó un prototipo con dos asientos. Al cumplir satisfactoriamente las pruebas, pasó a formar parte de la Fuerza Aérea del Brasil con el nombre de Super Tucano, contando ese país con 99 aeronaves en la actualidad, destinados a bases en la Amazonía.
Exportación
Vale decir que el Super Tucano estuvo envuelto en toda una polémica tiempo atrás, cuando Embraer estaba por consumar una venta de 36 unidades a Venezuela, que no se pudo concretar por la oposición de los Estados Unidos. El gobierno de ese país señaló que tenía potestad de veto a la venta de cualquier sistema de armas que utilice tecnología norteamericana.
Donde no hubo mayor problema fue en la compra de 25 aviones Super Tucano para la Fuerza Aérea de Colombia, operación que demandó un pago de US$234 millones a la propia compañía Embraer, ya que en esto no intervino el gobierno brasileño. Ya se han entregado 15 aviones y faltan otros 10, para completar el lote a mediados de este año.
En junio de 2007, República Dominicana ordenó la compra de 10 aeronaves, y recientemente Guatemala mostró su interés en adquirir la aeronave para la lucha antidrogas en su frontera con México.
Fuente: La Razon (Perú)